Esta entrada tenía que haber salido a la luz hace más de un mes..pero la falta de
tiempo, los viajes express y sobre todo los contratiempos que están a la orden de
nuestros días , nos han impedido seguir con esto.
Ya lo decía John Lennon ''todo lo que necesitas es amor'' el mundo necesita más amor, pero amor de verdad no del que nos intentan vender,que no podemos comprar y aún así lo hacemos en ''cómodos plazos'' y sin garantía para reparar en daños.
Estoy harta de escuchar hablar de la crisis económica, política..cuando lo que realmente está en quiebra es el amor, el mundo necesita menos amor propio y un poco más hacia el prójimo.
Hablando de San Valentín, dejando atrás los ya reiterados y cansados comentarios típicos de ''es el día más materialista del año''(junto a la época navideña), dejando atrás esas mentes hipócritas que tachan de superficial este día porque son unos enajenados emocionalmente y es su única manera de sentirse mejor con su ''yo'' espiritual ( aunque ya hayan celebrado miles de San Valentin llenos de regalos cargados de materialismo puro,donde hay más consumismo que sentimiento), dejando atrás todo eso, si observas los anuncios que se asoman por estas fechas a mi cada vez me asombran más por la ''gran'' intensidad de sus slogans de San Valentin y ya que nos encanta hablar claro, aunque esto vaya ligado a hacerlo mal, estamos hasta las narices de ver carteles con frases tales como '' Sí le quieres, no olvides recordárselo '' tranquilo que ya me encargo yo de recordárselo cada instante de vida como,cuando y cuanto me da la real gana.
¿Por qué no ha de existir un día dedicado al ''amor'' ? También existe el día de los Derechos Humanos y yo no los veo por ningún lado.
Últimamente amarse se está convirtiendo en un deporte de riesgo de lo más jodido y peligroso, para el cual aún no se han inventado protecciones que te garanticen una caída menos dolorosa. A lo que actualmente llamamos amor no es más que un quererse mucho a uno mismo a través de los demás , no confundamos conceptos, quererse hacía fuera y dar mucho para esperar recibir mucho más , no es amar. Entregarte a un público reducido a un espectador utilizando sus más sinceras emociones como amplificador no es estar enamorado. Deberían enseñar a querer desde dentro hacía fuera o vender manuales para principiantes y menos cajas de bombones por el valor de dos horas laborales y que más tarde se convierten en sentimiento de culpabilidad que intentas quitar pasando horas en un gimnasio valorado en minutos semanales aguantando a un insoportable y odioso jefe.
